Cala Pola es una de las mejores calas de la Costa Brava para ir con niños. Situada al principio de la carretera que une Tossa de Mar con Sant Feliu de Guíxols.
Para acceder a ella, primero hay que aparcar en una explanada que veremos pasados unos metros del Camping La Pola. Después, atravesar el camping andando, ya que es de libre acceso pero siempre y cuando se vaya a pie, y así poder llegar al final de éste, donde se encuentra la cala.
Es una pequeña cala muy bonita, rodeada de acantilados y pinares, con aguas color turquesa, donde veremos también algunas cuevas.
Suele estar muy concurrida por familias con niños ya que la mayoría de bañistas pertenecen al camping.
Dispone de algunos servicios como duchas y chiringuito.
También es parada de algunos barcos turísticos que recorren las calas de Tossa de Mar.
Si os gusta la idea podréis comprar el billete allí mismo para visitar las calas de alrededor o llegar en barco a esta desde otras calas vecinas como Cala Giverola.
También podéis reservar este paseo en catamarán por la Costa Brava o este curso de buceo para principiantes.
Una curiosidad de esta playa es que, según la leyenda local, en sus aguas habita una mítica sirena llamada Pola que atrae a los bañistas con su hermoso canto. Aunque esta historia puede parecer ficticia, es cierto que en la costa brava se han avistado algunas especies de delfines y cetáceos, lo que hace que la leyenda tenga un cierto fundamento en la realidad..
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